domingo, 8 de julio de 2007

LA PRISIÓN DE LOS FRACASADOS

La prisión de los fracasados se construyó para protegernos del mundo exterior.

En la prisión de los fracasados no existen las sonrisas ingenuas, toda sonrisa es irónica o amarga. Tampoco hay niños, pues en la prisión de los fracasados no existe cabida alguna para el futuro. Y mucho menos para la esperanza.

Bienvenidos a la prisión de los fracasados, donde la libertad es el mayor de los males. Bienvenidos a la única prisión de todo el mundo que carece de barrotes o muros.

Si algún día sientes que tu corazón late más despacio de lo normal, sonríe, y recibe mi más fría enhorabuena. Mira al cielo y siente mis palabras grabadas con fuego en tu mente. Escúchame:


Bienvenido a la prisión de los fracasados, el único sitio del que nadie sale por miedo a tener que volver.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ante la opción de elegir... la responsabilidad de decidir. Esa es probablemente la peor consecuencia de la libertad.