La hormona femenina siempre espera la iniciativa de la hormona masculina. Es el hombre el que se introduce dentro de la mujer, y no al revés.
El sexo nos eleva hasta los Dioses, dándonos a saborear el mayor de todos los dones: el don de la creación.
"La desdicha es el vínculo más estrecho de los corazones." (Jean de la Fontaine).
1 comentario:
Impresionante el segundo párrafo.
Te felicito públicamente desde aquí amigo Jean-Paul.
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